El martes 17 de mayo, 8 alumnos de tercero de ESO (acompañados por el profesor de Árabe Larbi Ghajjou) fuimos a Cádiz para asistir al encuentro “Dos Orillas”, en el que jóvenes de tercero y cuarto de los centros españoles de Tánger y Tetuán se reúnen con otros del instituto de Paterna de Rivera, un pueblo gaditano.
El primer día, llegamos a Tarifa, donde nos esperaban los paterneros, que nos dieron una acogedora bienvenida. Luego, nos dirigimos en autobús a Jerez de la Frontera, donde íbamos a alojarnos las tres noches siguientes.
El miércoles por la mañana, después del desayuno, fuimos a la sierra a hacer ciclismo, y llegamos, agotados, a un centro de observación de aves, donde disfrutamos de unas impresionantes vistas de las montañas. Terminamos el día visitando el precioso pueblo de Zahara de la Sierra.
A la mañana siguiente, visitamos el alcázar de Jerez, y luego tuvimos tiempo libre para ir de compras en el centro de la ciudad. Por la tarde, fuimos a Paterna de Rivera, el pueblo de nuestros huéspedes, en el que nos enseñaron su instituto y sus casas, así como un poco de su historia –en la que destacan ilustres cantaores, como el Perro de Paterna.
El viernes fuimos a Cádiz, una ciudad que nos fascinó con sus calles históricas y su gente tan amable. Allí, entramos al Museo de la ciudad, donde pudimos ver restos fenicios y romanos de Gades. Por la tarde, fuimos a un cursillo de cocina, en el que cada grupo preparaba una receta distinta. Tras degustar lo que habíamos preparado, fuimos a Tarifa, donde dormiríamos las dos últimas noches.
El sábado visitamos las ruinas de Baelo Claudia, una antigua ciudad romana situada a unos 20 kilómetros de Tarifa, en la playa de Bolonia. Allí, por la tarde, nos dimos un chapuzón en las frescas aguas del estrecho.
El miércoles por la mañana, después del desayuno, fuimos a la sierra a hacer ciclismo, y llegamos, agotados, a un centro de observación de aves, donde disfrutamos de unas impresionantes vistas de las montañas. Terminamos el día visitando el precioso pueblo de Zahara de la Sierra.
A la mañana siguiente, visitamos el alcázar de Jerez, y luego tuvimos tiempo libre para ir de compras en el centro de la ciudad. Por la tarde, fuimos a Paterna de Rivera, el pueblo de nuestros huéspedes, en el que nos enseñaron su instituto y sus casas, así como un poco de su historia –en la que destacan ilustres cantaores, como el Perro de Paterna.
El viernes fuimos a Cádiz, una ciudad que nos fascinó con sus calles históricas y su gente tan amable. Allí, entramos al Museo de la ciudad, donde pudimos ver restos fenicios y romanos de Gades. Por la tarde, fuimos a un cursillo de cocina, en el que cada grupo preparaba una receta distinta. Tras degustar lo que habíamos preparado, fuimos a Tarifa, donde dormiríamos las dos últimas noches.
El sábado visitamos las ruinas de Baelo Claudia, una antigua ciudad romana situada a unos 20 kilómetros de Tarifa, en la playa de Bolonia. Allí, por la tarde, nos dimos un chapuzón en las frescas aguas del estrecho.
Por la noche, y a modo de fiesta de despedida, fuimos a una discoteca, donde disfrutamos de nuestra última noche en compañía de nuestros nuevos amigos gaditanos.
Al día siguiente nos despedimos de ellos, con lágrimas en los ojos, recordando los divertidos momentos que habíamos pasado con todos ellos, tanto alumnos como profesores y empezamos la cuenta atrás para el día en que ellos vendrían a Marruecos.
Khalil Bourjila, 3ºB E.S.O.
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